miércoles, 31 de diciembre de 2008

Un año más, o menos

Faltan algo más de 2 horas para que acabe este año y mi conciencia me dice que algo habrá que escribir en este momento, como última entrada del año. Un año más que se va, o menos que queda, según el estado de ánimo de la persona en cuestión. Yo me declino en estos momentos por pensar que es un año más vivido, y que quedarán muchos más.

2008 ha sido un año especial, por no buscar otra palabra más complicada. He conocido los dos extremos, las dos caras de la moneda, a lo que he aludido mucho en este blog. Y eso hace que haya cambiado mucho de cómo era a principio de año a cómo soy ahora; aunque no dudo que esos cambios eran, si no buenos del todo, al menos sí inevitables.

Es ahora cuando debería hacer una lista de los propósitos para el año que entra. No obstante, no lo voy a hacer, pues pienso que las metas que me ponga ahora pueden tener poca relevancia de aquí a unos meses, o surgir otras más importantes. Prefiero echar a andar sin un rumbo fijo, y ya veré lo que depara el camino. Rara reflexión para alguien que piensa las cosas hasta la saciedad antes de hacerlas.

De momento de lo único que tengo que estar pendiente es de no olvidarme la entrada para esta noche, ni todos los abalorios necesarios para los mojitos, que costado ha decidirnos a hacerlos como para ahora acabar bebiendo bacardi a palo seco.

domingo, 28 de diciembre de 2008

Amores electrónicos

Hoy voy a tratar de cambiar el enfoque del blog hacia una perspectiva un poco menos agónica (esto me suena... ), aprovechando que tengo algo de lo que quejarme.

Llevo yo bastantes días de esta cadenciosa vida lamentando la pérdida de aquel que siempre estuvo a mi lado, tanto en los malos momentos como en los buenos, en la mejor de la fiestas y en el mayor de los aburrimientos; me refiero, como imaginais, a mi mp3. Pues bien, después de llorar algunos días sobre su cadáver electrónico, me decidí por fin a buscarle sustituto, cual padre cabreado porque se le ha muerto el perro al niño, y tiene que comprarle otro.

Y es que todo lo que implique salir a la calle da una pereza increíble si no lo acompañas con Avalanch, Centinela o similares. Son los eternos acompañantes de mis caminatas: a la hora de bajarse del thader andando, cuando se trata de ir a la parada del autobús, o en los primeros días de universidad, vagabundeando solo por los alrededores de la facultad de Medicina.

Hablando ya del traumático proceso de intercambio, que tuvo lugar en Carrefour por el módico precio de 30€, decir que ocurrió sin ningún incidente digno de mención. Nada más llegar, lo ví, él me vio a mí, y surgio un amor inmediato, a primera vista. De estos que salen en las películas americanas, y que nunca pasa en la realidad. La unión fue irremediable.

Con mi nuevo amor en el bolsillo de la chaqueta ya, salí del Carrefour y me fui de fiesta (bueno, me fui al Ítaca a tomarme un café y luego a ver una película muy paranoica).

Y llega esta mañana, una mañana especial: él me estaba esperando. Lo sostuve entre mis manos un instante, y me dispuse a conocerlo más fondo, a interiorizar con él... Pero ya me dijo alguien una vez que el primer amor es el de verdad, y que nunca lo olvidas. Aquel montón de circuitos y transistores no era como mi venerado primer mp3. Tenía algo que lo hacía diferente, era, no sé: funcionaba a batería...

Maldita sea la sombra del que lo inventó. Para qué cojones sirve un mp3 a batería... La gracia de estos cacharritos es poder escuchar música allí donde no hay ninguna tecnología, lo que incluye cualquier forma de energía eléctrica. Y lo peor es que me pongo a buscar el supuesto cargador, y no lo encuentro por ninguna parte. Ahora maldigo a la sombra del que comercializó dicho cargador a parte, y con un extra de maravedíes a desembolsar, claro.

Pero no debe cundir el pánico. Me ha dado por ojear la guía del usuario, esa que nunca se mira, y he descubierto que, al parecer, se puede cargar también con el propio ordenador, directamente con el USB. Es un alivio, porque no me apetecía ir al Carrefour y ponerme a pelearme con ellos. Ahora dentro de 3 horas comprobaré si de verdad se ha cargado, y si es así, me conformaré con él.

No obstante, es un amor forzado, y todos sabemos como acaban esos amores... pero a la mierda, al fin y al cabo es un jodido mp3, cuando se rompa o me enfade con él, otro y a tomar por culo.

Eso sí, siempre recuerda: una persona no es un mp3.

¡Saludos!

martes, 23 de diciembre de 2008

Sinonimia

Porque la vida también cambia el diccionario (original-traducción):

· "Sigue adelante"- Desvíate.

· "Olvida"- Muere poco a poco.

· "Tú vales mucho"- Te veo bien jodido, ¿eh?

· "Las tías no valen nada"- Vamos a cambiar de tema.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Medicina

Hablemos de medicina hoy. Pero tranquilos, no voy a empezar a soltar por aquí comentarios tecnicistas ni nada de eso, porque todo el mundo que estamos en una carrera podríamos hacer lo mismo, y hay algunas licenciaturas por ahí que bufff... no quiero conocerlas...

Vamos a dejar una idea general de lo que vienen siendo estos tres meses:

· Bioestadística... Sí, tenía que empezar con esta, y cualquiera que esté dando estadística en alguna de sus variedades, me entenderá. Es la única asignatura en la que, tras 4 caras de fórmulas, nº decimales de cinco cifras, porcentajes, miles de incógnitas gracias a las cuales prácticamente me he aprendido ya el alfabeto griego (para que usar como variable la típica "x", queda mucho más imponente llamarla "lambda"), etcétera.... Resulta que no podemos solucionar el problema que se nos ha planteado. ¡Oh yeah!, esto es lo que llaman una materia útil.

Aparte de esto, también citar un ejemplo de los problemas a los que nos tenemos que enfrentar. Son un razonamiento de este tipo: a usted le duele el tobillo, entonces, cualquier médico ignorante le haría una radiografía, miraría si hay algo roto y aplicaría un diagnóstico eficaz; ¡pero no! Nosotros sabemos bioestadística, así que lo que vamos a hacer es comprobar a cuantos le ha dolido en esta semana el tobillo... y ¡vaya! resulta que solo ha habido una persona con ese síntoma, ¡y a los dos días tuvo que volver por apendicitis! Entonces... podemos decir que el 100% de los pacientes que ha venido con dolor en el tobillo tenía apendicitis. Ya está, fuera radiografías y gilipolleces de esas, ¡usted al quirófano pero ya!

Podeis pensar que he exagerado, y es cierto, pero no os engañeis, esto según nos han dicho funciona muchas veces así.

· Anatomía. Bueno, aquí no me puedo quejar, porque en el fondo me gusta, y además, como ya le dije ayer a una amiga, hay que aceptar donde se ha metido uno. Pero madre mía, cuántas cosas tiene el cuerpo... Ahora que lo pienso sí que me puedo quejar de una cosa. En esta asignatura, las opiniones divergen de forma sorprendente. Ahora mismo tengo tres fuentes básicas de información: mi libro (Rouvière), mi atlas (Sobotta) y los apuntes de clase (Guijarro :D); y a la hora de buscar un músculo, hueso... es jodidamente difícil que se pongan de acuerdo en algo. Entonces, ¿qué hago? Pues, evidentemente, hacer caso a los apuntes. Si nuestro catedrático dice que en tal sitio hay un hueso, para mí lo hay, y punto. Tanto dinero gastado en libros para esto...

·Historia. El principal problema de esta asignatura es que no consigo que nadie se la salte, y me toca irme solo a la cantina, o en su defecto, a la biblioteca.

Como me dijeron por aquí que suelto parrafas inmensas, vamos a cortar aquí, y ya contaré la otra mitad otro día. Además, tengo que ponerme con la bioquímica.

¡Que os vaya bien, mortales!

martes, 9 de diciembre de 2008

La obviedad rechazada



He aquí otra de esas fotos de lugares bohemios que tanto me gustan, aunque frecuento muy poco.


El primero de estos sitios fue Yeste, hace 3 años (hay una foto en esta pagina a la derecha); el segundo, Moratalla, hace unos meses; el último, el de la foto, un sitio mucho más cercano, la sierra de Carrascoy, cerca del Valle Perdido, eso sí, próximo a la cima de una colina que habia por allí.



Ahora que, hay que decir que esta vez había una diferencia, relativa a la compañía (sin ofender, uli, ya sabes como funcionan estas cosas :D).


Y resulta que no puedes anticiparte a la vida, ni a sus batacazos. Nada de intentar esquivarlos cortando de tajo el asunto, hay que pegárselos, esto es como montar en bici.


Intenté alejarme porque parecía la solución más obvia, lo que todo el mundo acababa haciendo. Pero la solución era mucho más fácil :-)



miércoles, 3 de diciembre de 2008

Aversión al jamón

No tiene doble sentido, segunda interpretación, no es ningún intento de metáfora ni una original forma de empezar a hablar de cualquier otra cosa. Es simplemente eso, le he cogido poco gusto al jamón serrano este curao tan español.

En cuanto a la razón, podéis deducirla vosotros mismos si leéis en la entrada anterior, el punto 1., sobre las cosas buenas que iba a tener la semana.

Digamos que es un daño colateral de estudiar medicina.

Más detalles, en persona.

P.D. Creo que es la vez que menos escribo en lo que llevo de blog.